El pasado de la Galicia rural, un ejemplo para reflexionar sobre el futuro del campo español

Los ritmos del rural gallego, lo que es “esencial” en la vida, el regreso a las raíces en el contexto de la pandemia y los efectos del cambio climático se reflejan en la exposición “La vida lenta”, que se muestra en Vigo y reflexiona y reconoce los “privilegios” de los habitantes del rural.

En declaraciones a Efeagro, el comisario de “A vida lenta. Memorias e ritmos do rural galego” (título original), Aser Álvarez, explica que se trata de un homenaje a aquellas generaciones “que, a lo largo del siglo XX, trataron de sacar a sus familias adelante y vivir en armonía con el territorio”, un “ejercicio colectivo” para conocer el pasado y reflexionar sobre el futuro del rural.

Abierta al público desde este martes en la Sede Afundación Vigo, muestra fotografías, vídeos, poemas y música del rural gallego desde 1930 hasta finales del siglo XX -con material de Jaume Lloveras, Juan Piñeiro Andión, Carlos Valcárcel y del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, entre otros- pero, como insiste el comisario, es extrapolable a otros territorios rurales del país.

Esta exposición genera “una reflexión muy necesaria porque también la respuesta a la crisis climática, la crisis de esa España Vaciada y la despoblación del mundo rural pasan por una reactivación del mundo rural”, razona Álvarez, quien recuerda que dicha reactivación ha de ser de forma respetuosa con el entorno, un “volver a las raíces y a un equilibrio entre el ser humano y la naturaleza”.

Sin embargo, aunque se resuma rural como un término que engloba el campo español, insiste en que no se puede ver como algo homogéneo, ya que cada territorio tiene su diversidad y su historia.

Esta muestra, que estará en Vigo hasta finales de mayo junto a diferentes actividades online, está pensado traspasarla en el futuro a otras ciudades gallegas, para ampliar el debate sobre quiénes han sido los auténticos privilegiados incluso en esta pandemia del coronavirus, y no descartan que se pueda replicar en otras regiones.

“El mundo rural parecía que era algo que no tenía futuro ni posibilidades y ahora vemos que las personas que pueden vivir y trabajar en el mundo rural son unos auténticos privilegiados”, por poder vivir “en armonía con esa vida lenta, con la naturaleza, con los ciclos y los ritmos naturales”, alega el comisario, también director de Arraianos Producions.

Esta revolución de las dinámicas en las ciudades causada por la pandemia ha servido también para quitar “la soberbia que a veces sale sobre lo que es importante o lo que no” y los beneficios reales que tiene la urbe frente a vivir en el campo sin idealizarlo, añade.

Por ello, resalta el “comunitarismo” que había y hay en el campo para afrontar los retos y poder sacar adelante a sus familias y sus negocios, pero respetando el medio ambiente por el cuidado a la naturaleza y para sus descendientes.

“No hay posibilidad de producir materias primas de una calidad extraordinaria, con garantía de origen, como es en Galicia actualmente, sin que haya un medio rural vivo, y conviene no olvidarlo nunca“, insiste el comisario.

Mirando a los próximos años, asegura que hay territorios en riesgo de convertirse en “desiertos humanos” en 20 o 30 años y, sabiendo eso, invita a reflexionar sobre ello.

Sin embargo, recalca que volver al rural no es volver en las mismas condiciones que hace cincuenta años, sino con las herramientas del mundo contemporáneo.

“No podemos volver a vivir a una aldea si no tenemos conexión a internet, si no tenemos unas buenas comunicaciones, servicios”, reconoce.

Añade que incluso ante esta pandemia del coronavirus, que ha generado una crisis económica y sanitaria difícilmente comparable a las recientes, sumado al impacto del cambio climático en el territorio, hay que saber ver “las cosas buenas” y encontrar oportunidades.

“Si hay una salida para esta crisis y al cambio climático es precisamente a través de una reactivación del medio rural y de volver a conectar con lo que somos”, concluye.

Fonte: EFE Agro - El pasado de la Galicia rural, un ejemplo para reflexionar sobre el futuro del campo español

MENÚ